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5 tips para que se enamoren de tu ONG

13.06.14

ositos

Desde el blog Espacios Conectados de Fundación Hazloposible, te acercamos cinco elementos para que pases de una comunicación institucional en tu ONG a una personal. ¡No te lo pierdas!

¿Crees a los políticos, a los bancos, a las grandes instituciones? ¿Crees a las ONG? Hoy en día la entidad que goza de mayor confianza y reputación es “la persona”. Preguntamos nuestras dudas a nuestros contactos, pedimos referencias en las redes, consultamos a nuestros conocidos sobre sus propias experiencias en relación a un tema para tomar nuestras decisiones.

Las ONG estamos conformadas por personas y trabajamos por las personas, así que, ¿por qué no comportarnos como una? Aquí te compartimos 5 tips para que tu ONG pueda transformar su comunicación institucional en una comunicación personal y acercarse a las personas sin que éstas salgan corriendo por la autopista de la indiferencia y la desconfianza.

1. Cuando les hables de ti, no les hables de ti, sino de los tuyos. Todo el mundo quiere “vender su librito” como el último manuscrito de Alejandría, sin embargo, las personas son libros irrefutables, no en lo que dicen, sino en lo que son. Por eso, habla de las personas que son tu causa, no necesitas recurrir a un famoso o a un estereotipo para que les represente. Habla de los tuyos, de las personas con las que colaboráis para que mejoren sus circunstancias de vida, de sus historias, de sus interioridades si ellas quieren compartirlas. Habla de tu ONG como de una persona y habla de quienes trabajan en ella. No hay nada que enamore más que una persona y son con las personas con las que establecemos relaciones.
2. No hables de los tuyos en términos de victimización, pero tampoco romantices su necesidad. Tu comunicación no puede ser un diario de alarma amarillista, pero tampoco un Facebook en el que la pobreza o la violencia salen guapas. Si vas a utilizar el lenguaje visual, una imagen, un vídeo, busca siempre captar la dignidad de las personas sin fabricar un escenario “digerible” para tu audiencia, encuentra el punto medio entre los opuestos de una misma realidad. No valen fotos impresionantes si no muestran el respeto desde el que deberían ser tomadas. Recuerda que lo que dices y cómo lo dices es otra forma de hablar de ti, si esquematizas lo que dices, tu comunicación, que puede ser técnicamente perfecta, perderá personalidad.
3. Piensa a qué parte de la persona a la que hablas te diriges cuando quieres comunicar a tu audiencia. Si quieres acercar al que te escucha, lee o ve, si quieres que simpatice con tu causa, háblale a sus emociones; si quieres que te recuerde, sorpréndele; si quieres que te conozca a profundidad, muéstrale tus fortalezas y tus debilidades, dedícale todo el tiempo necesario; si quieres que se una a tu causa, no le presiones, haz que tu comunicación sea de persona a persona, háblale a su emoción y a su razón a la vez, sorpréndele, muéstrate tal cual eres y dale tiempo. Los militantes que se hacen de prisa son amor de un día.
4. Una vez que establezcas la relación, nútrela, profundízala y renuévala periódicamente. Mantener a tus socios, suscriptores o simpatizantes informados no es comunicar. La comunicación debe ser en la medida de lo posible bidireccional y, como cualquier conversación, debe tener un propósito común para los participantes. Se trata de tomarte una taza de té, hablar, escuchar, recordar juntos las cosas que más os gustan con relación a vuestro rol dentro de la relación entre persona y persona-ONG, no olvides preguntar, ponerte en el lugar del otro y hacer un esfuerzo de mutua comprensión. Y tal como sucede en las relaciones duraderas, ¡hay que planear nuevas formas de reencontrarse, fuera de la rutina y lo cómodo, para que la persona ¡quiera seguir viéndote!Una vez que establezcas la relación, nútrela, profundízala y renuévala periódicamente. Mantener a tus socios, suscriptores o simpatizantes informados no es comunicar. La comunicación debe ser en la medida de lo posible bidireccional y, como cualquier conversación, debe tener un propósito común para los participantes. Se trata de tomarte una taza de té, hablar, escuchar, recordar juntos las cosas que más os gustan con relación a vuestro rol dentro de la relación entre persona y persona-ONG, no olvides preguntar, ponerte en el lugar del otro y hacer un esfuerzo de mutua comprensión. Y tal como sucede en las relaciones duraderas, ¡hay que planear nuevas formas de reencontrarse, fuera de la rutina y lo cómodo, para que la persona ¡quiera seguir viéndote!
5. Y finalmente, da las gracias siempre y con cualquier pretexto. Sé sincero y desde ese estado reconoce y agradece todo lo que las personas que apoyan a tu ONG hacen. No hables desde el interés ni intentes manipular para sacar algo más. Sé honesto y reflexiona sobre lo que tu ONG y sus personas quieren agradecer a las personas con las que tenéis una relación. Reconoce su aportación y si puedes recompénsala. No es necesario que sea con un regalo físico, de persona a persona tenemos muchas formas de reconocernos y todas ellas se fundamentan en el acto de “hacernos sentir presentes uno para el otro”.

La imagen es de Bigo Fotografien en Flickr

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