Dudas acerca de la figura del director ejecutivo de una asociación

Como sabrás, una asociación tiene la capacidad de dotarse de la estructura interna acorde a sus necesidades, siempre y cuando garantice el funcionamiento democrático de la misma.

En el caso de la figura del director ejecutivo, ésta es interesante, en la medida en que la junta directiva delega la ejecución de decisiones y el funcionamiento diario de la asociación sobre él, no teniendo los directivos que reunirse constantemente.
Le dota así a la asociación de agilidad, y libera la carga de trabajo de una directiva que normalmente no cobra por sus funciones.

Piensa, de todos modos, que la función que en algunas asociaciones realiza el director ejecutivo, en otras lo hace el administrador, o el secretario. El nombre es lo de menos, mientras haya una persona remunerada dedicada en exclusiva a la asociación.

Por otra parte, aclararte, que La Ley Orgánica 1/2002, reguladora del derecho de asociación, incluyó la novedad de permitir la retribución de los directivos por el ejercicio de su cargo.
Hasta entonces, la normativa no lo permitía en las asociaciones sin ánimo de lucro, correspondiendo este cambio a una demanda de las grandes ongs. Como verás, si actualmente un presidente puede ser retribuido por el ejercicio de su cargo, la figura del director ejecutivo se hace innecesaria en la mayoría de las organizaciones.